lunes, 5 de septiembre de 2011

Dalton Highway - Cruzar el Círculo Polar Ártico por carretera


Cruzar el Círculo Polar Ártico por carretera, puede resultar toda una experiencia y un desafío. Un lugar para hacerlo es a través de la ruta Dalton (Ruta 11 Alaska), con una extensión de unos 667 kilómetros atravesando paisajes increíbles por Alaska.

Photo by Micah Bochart
El trazado de esta carretera comienza en la Elliott Highway, al norte de Fairbanks, y termina en Deadhorse, muy cerca del océano ártico, en los campos petrolíferos de Prudhoe Bay. La Dalton Highway se construyó en 1974 para servir de carretera de transporte de suministros para servir de apoyo al oleoducto Trans-Alaska Pipeline System.


A lo largo de esta ruta se encuentran localizados solo tres pueblos: Coldfoot (con una población censada de 13 personas) en la milla 175, Wiseman (con una población de 22 personas) en la milla 188, y Deadhorse (con 25 residentes permanentes censados, aunque con una población estacional de entre 3.500 y 5.000 habitantes, cifra que puede incrementarse temporalmente en función de la producción de crudo de los pozos de Purdhoe Bay) que, como ya hemos dicho, se encuentra al final de la carretera Dalton, en la milla 414.

Photo by Greg Bulla
Conducir por esta carretera a través de un territorio tan salvaje tiene que suponer una gran satisfacción, pero al final nos espera una pequeña decepción. Apenas quedan 13 kilómetros para alcanzar las costas del Océano Ártico, pero no está permitido llegar hasta allí en coche particular. Las pistas que llegan hasta el mar son todas de titularidad privada de las compañías petrolíferas. El que quiera tocar con sus manos las frías aguas del Ártico tendrá que bajar de su coche y subir a alguno de los autobuses turísticos que tienen permitido el acceso a las playas de Prudhoe Bay.

Completar su recorrido requiere, con buenas condiciones meteorológicas, unas 12-14 horas de conducción, siempre que no nos detengamos a contemplar el paisaje, observar la fauna salvaje (caribús, bueyes almizcleros, osos, lobos, zorros, etc.), o a cambiar una rueda dañada, percance más que probable en una pista de grava. Las guías turísticas aconsejan llevar al menos dos neumaticos completos de repuesto.


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